Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
El sinfín de facetas míticas que pueden mostrarse en la pantalla grande cuando se habla de un personaje como “Cantinflas”, que tanta tela argumental ha dado a la crítica popular y a la especializada, abren el abanico de necesidades visuales de tanta gente que asiste al cine. Para desgracia de este filme del cineasta mexicano Sebastián del Amo, un personaje público de reconocidas dimensiones, no puede confundirse y magnificarse al grado de considerarlo, prácticamente como el mayor ícono de la comedia mexicana.
Es cierto que no es una encomienda nada sencilla realizar una película biográfica de una persona de carácter público como Mario Alfonso Moreno Reyes, sin embargo, el exagerado dimensionamiento del que hace uso Del Amo, dejan mal parado al largometraje, que a pesar de ello, sale a flote valiéndose de otros elementos del lenguaje cinematográfico.
El trabajo histriónico, es uno de esos elementos que rescatan la visión superlativa del director. Si bien la crítica ha sido fuerte en este rubro, por haber contratado al actor español Óscar Jaenada para interpretar al mexicanísimo Cantinflas, lo cierto es que su trabajo resulta bastante convincente, pues no solo es el manejo de la voz del comediante, sino sus gestos, sus movimientos y sobre todo su actitud, que al menos frente a las cámaras nos mostraba el fallecido personaje original. Es pues un acierto, que sigue generando polémica por la nacionalidad del protagonista, pero que al final de la jornada, le aseguro que lo va a convencer.
El argumento es acaso al que le falta fuerza, pues no resulta tan sencillo transitar 106 minutos de película cuando un planteamiento argumental es tan simple, sin mayores muestras de tensión, sin una pizca de dramatismo puro. Probablemente sea esto, una de las deficiencias más notorias del filme, que sin embargo no deja de ser atractivo para muchos de los admiradores del cómico parlanchín.
En términos generales una cinta que navega en el mar de lo común, apenas rescatada por el trabajo actoral de Óscar Jadeada, pero que se siente la falta de intensidad argumental.
Solo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o ingrese al sitio web www.inter-medios.jimdo.com